La "hora azul" en fotografía es ese otro momento "mágico" del día que  ocurre justo antes del amanecer y después de la puesta del sol (de nuevo buena noticia para madrugadores y trasnochadores).

Es un período de tiempo relativamente breve, que generalmente dura unos 30 minutos, y se llama "hora azul" debido al característico tono azul intenso que predomina en el cielo durante este rato.

La hora azul ocurre cuando el sol está justo debajo del horizonte, y el cielo se encuentra en una situación particular de iluminación. Durante este tiempo, la luz del sol todavía está presente en la atmósfera, pero no directamente visible desde el lugar de observación. 

La luz solar se dispersa aún más, y las longitudes de onda más cortas (como el azul) son las que prevalecen. 

El resultado es un cielo de un color azul profundo y saturado, que crea un ambiente misterioso. La hora azul puede ser ideal para fotografiar paisajes urbanos o rurales, así como para tomar fotografías de arquitectura. El tono azul del cielo a menudo contrasta muy bien con las luces artificiales de la ciudad o con iluminaciones especiales en edificios y monumentos (que suelen ser cálidas).

Es casi lo contrario a la hora dorada.

Tienes que tener en cuenta que la hora azul es un período breve, por lo que a veces es necesario preparar la configuración de la cámara y la composición de la fotografía antes de que llegue este momento. Además, la luz cambiará rápidamente, por lo que debemos ser relativamente rápidos para capturar la imagen que deseemos.

Hora Dorada: La hora dorada ocurre dos veces al día, después de la salida del sol y poco antes de la puesta del sol. Es un período de luz cálida y suave.

Hora Azul: La hora azul también ocurre dos veces al día, pero antes del amanecer y después de la puesta del sol, cuando el sol está por debajo del horizonte. Es un período de luz fría y azulada.

Hora Dorada: Durante la hora dorada, la luz del sol atraviesa una mayor cantidad de atmósfera antes de llegar a la tierra, lo que deja predominantes los tonos cálidos (como el dorado, el naranja y el rojo).

Hora Azul: Durante la hora azul, la luz del sol sigue presente en la atmósfera, pero no es visible desde el lugar de observación. La luz solar dispersa se compone principalmente de tonos azules profundos (incluso morados), creando un ambiente frío y misterioso.

Fíjate en las siguientes fotografías, ambas tomadas desde mi ventana, el mismo día, pero con unos 15 minutos de diferencia...

Aquí, en ambos casos, la luz suele ser suave y difusa, pero ten en cuenta que un caso es cálida y en el otro fría, con lo que a pesar de tener la misma calidad, las imágenes capturadas pueden devolver sensaciones muy diferentes.

Otro punto en común, cada momento dura unos 30 minutos, la hora azul suele ser un poco más corta que la dorada. Pero ten en cuenta que según la época del año en la que nos encontremos una y otra pueden ser más cortas o más largas, por ejemplo, en verano se alargan los días, así que la hora dorada también dura más.

Supongo que ya se te habrán ocurrido mil y una situaciones y fotos que puedes hacer durante esos momentos del día tan especiales. Así que de lo que te voy a hablar es de algunos puntos a tener en cuenta para aprovechar bien esos mágicos ratos de luz...

1. Planifica con anticipación:
   Investiga un poco los horarios del amanecer y la puesta del sol en la ubicación. Utiliza aplicaciones o sitios web que proporcionen esa información.
   
   
2. Llega temprano y/o quédate después:
   Para la "hora dorada", llega antes de la puesta del sol, y para la "hora azul", quédate después de que se ponga el sol. Así podrás capturar toda la magia de la transición y aprovechar los distintos matices y tonos que ofrecen estos momentos.
   
   
3. Configura tu equipo de antemano:
   Asegúrate de tener tu cámara, trípode (habitualmente necesario) y cualquier otro equipo que necesites preparados y listos para la acción (como filtros, disparador remoto o material de iluminación).
   
   
4. Usa el modo manual o semiautomático:
   En estos momentos es recomendable tener más control sobre la exposición. Esto te permitirá decidir cómo ajustar la configuración según las condiciones de luz cambiantes y lograr el efecto deseado, en lugar de "desear" que la cámara acierte con lo que quieres obtener.
   
   
5. Aprovecha los colores:
   Durante la hora dorada, aprovecha la cálida luz que da unas sensaciones casi opuestas a lo que ocurre durante la hora azul, en la que los tonos se vuelven fríos y azules. Hay gente que prefiere la hora dorada para retrato y la hora azul para paisaje (especialmente urbano).
   
   
6. Sé creativo con los reflejos:
   Durante ambas horas, el agua puede reflejar los tonos, lo que añadirá un toque mágico a tus fotos. Además, durante la hora azul, las luces artificiales suelen encenderse, cosa que también se puede aprovechar muy bien en los reflejos.
   
   
7. Aprovecha el contraluz:
   Te habrás dado cuenta de que muchas de las fotos de ejemplo las hice a contraluz. Es para destacar las características de las luz de estos dos momento, pero también porque me parece que las propias condiciones con las que nos encontramos se prestan a ello. Así que aprovéchalo.
   
   

Recuerda que tanto la "hora dorada" como la "hora azul" son momentos relativamente efímeros, así que sé paciente y mantén los ojos abiertos para capturar la luz y los escenarios que hacen que estas horas sean tan especiales para la fotografía. 

Pero ten en cuenta que casi siempre podrás visitar en varias ocasiones la misma localización, lo que te permitirá experimentar y divertirte para explotar tu creatividad.